El amor, esa fuerza tan bonita que mueve al mundo y que puede ser tan dolorosa a veces. Superar una ruptura amorosa es algo por lo que casi todos pasamos y que indudablemente cambia nuestro ser.
Pensamos que hemos encontrado a la persona especial que tanto buscamos y luego nos topamos con que esa persona ya no quiere estar más a nuestro lado.
Es un trago amargo, que te deja con un montón de inseguridades y sin saber hacia dónde dirigirte. Ves parejas felices por todos lados y te preguntas ¿Por qué yo no?
Atrás quedan las románticas veladas, las salidas, las discusiones por tonterías o por cosas significantes. Cosas que tú creías parte del conjunto y necesarias para mantener viva la relación. Y es que es normal y sano discutir de vez en cuando, pero cuando se torna un hábito rutinario termina destruyendo toda relación.
Al principio de la ruptura sentimental
Te encuentras solo y no sabes que dirección tomar, ya que tenías otros planes de vida. Tu mundo se desmorona como un castillo de naipes y tienes ante ti la ardua tarea de reconstruirlo al mismo tiempo que intentas superar una ruptura amorosa. No es nada fácil.
Muchas veces no nos damos cuenta de que estamos en una relación que no satisface a ambas partes.
Algunas veces nos negamos a ver los hechos por miedo a estar solos. Entonces llega un día en que uno de los dos decide partir.
Lo que no alcanzamos a ver sumidos en el dolor, es que el que decide partir ya ha pasado por el sufrimiento de romper antes de que termine la relación.
Tomar esa decisión es muy difícil cuando aún hay sentimientos.
Posiblemente la otra persona se ha dado cuenta de que es mejor andar por caminos separados, ya que la presente situación no os hace felices. Ya sea porque los sentimientos han cambiado o porque hay demasiados enfrentamientos.
Es cierto que a veces la decisión de dejar a alguien no es tan meditada, algunas personas simplemente saltan de un amor a otro sin dar demasiada explicación.
Hay gente que el simple hecho de sentirse atados les crea tal inseguridad que deciden abandonar sus relaciones cuando estas se tornan un poco más ceñidas.
Si esto sucede, eso significa que esa persona no era para nosotros, ya que buscábamos algo más.
Curiosamente nos damos cuenta de lo maravilloso que era estar juntos cuando ya no estamos con la persona amada, nos autoengañamos y martirizamos con la idea de lo que fue o pudo haber sido.
Nos sentimos como si nos hubieran arrancado una parte de nosotros mismos.
Debemos ver que quizás no era el momento para esa persona de estabilizarse. No hay nada de malo en ninguna de las dos personas, simplemente diferentes estadios en la vida.
Es mejor que el que decide marchar continúe su camino y deje que otro amor venga. Otro amor que nos complemente y nos entienda mejor.
¿Cómo recuperar a mi ex?
Esta frase tiene un montón de búsquedas en Internet. Hay muchos que intentan lucrarse de este dolor y ofrecen técnicas e ilusiones (a un módico precio) que a la larga son inútiles.
Es inevitable que pensemos en recuperar a nuestras ex parejas. Es normal que sintamos que sin su compañía andamos a la deriva, aún más cuando hemos pasado muchos años juntos.
Tienes que pensar que rompisteis por algún motivo. Si continúas siendo quien eras y simplemente llevas una máscara que dice lo contrario, aunque volváis por añoranza, el mismo problema surgirá de nuevo.
Mi consejo es que busques en ti y veas que puedes hacer por ti mismo. Si lo consigues y te conviertes en una mejor versión de lo que eras, no simplemente lo verás reflejado en tus relaciones, sino que lo sentirás en tu propio ser.
Deja a un lado cualquier sentimiento de desesperación por volver con tu ex. Céntrate en ti. Puedes pensar que si dejas pasar el tiempo esa persona se alejará más y más y tendrás menos posibilidades.
Ten por seguro de que si persigues o atosigas en ese estado conseguirás el efecto opuesto.
Si trabajas en esto, puede que en un futuro tu ex pareja quiera volver contigo y puede también que tú ya no quieras volver.
Cuando dejamos ir, la resistencia cede. Cuando nos resistimos, todo se aleja aún más. No debemos dejar ir a nuestro ex como estrategia para hacer que vuelva, si no eres sincero en esto no vas a conseguir nada duradero.
¿Cómo salgo adelante?
El primer paso para superar una ruptura amorosa es buscar en tu interior, tomar tu tiempo para estar contigo mismo y sanar. Tienes que saber y tener en cuenta que te enfrentarás a estas 5 etapas:
Negación: Todo está bien, esto es simplemente una pelea, pronto volveremos es solo algo temporal.
Negamos la realidad para poder proseguir con nuestra vida, dándonos falsas esperanzas.
Ira: ¿Por qué a mí? ¡No es justo!, ¿Cómo me puede estar pasando esto? ¡Le odio!
Nos indignamos por lo sucedido y culpamos a los demás.
Negociación: Por favor, dame otra oportunidad, prometo hacer todo lo posible por mantener nuestra relación, quizás podemos ser amigos y quién sabe, más adelante volver juntos.
Intentamos por todos los medios recuperar lo perdido. Fantaseamos con la idea de revertir el proceso y buscamos estrategias para hacer que eso sea posible.
Depresión o nostalgia: Estoy tan triste… ¿Por qué hacer algo? ¿Qué sentido tiene? Le echo tanto de menos…
Nos sentimos como dentro de un pozo sin fuerzas para salir. Es un momento importante que debe ser procesado, debemos tomar nuestro tiempo para salir de él.
Aceptación: No hay marcha atrás, no hay solución, no puedo luchar contra la realidad, debería asumir y aceptar que no volverá.
La etapa final llega con la paz y la comprensión. Cuando aceptamos la realidad el único camino es hacia arriba.
Mi experiencia al superar una ruptura.
En mi caso fui fluctuando de una a otra etapa, “Curiosamente” recayendo cada vez que mantenía contacto con mi ex.
Algo que me ayudó bastante fue escribir cómo me sentía, también hice una lista con las cosas que no iban bien en la relación. Fui releyendo y anotando nuevos pensamientos en los bordes de los escritos conforme pasaban los días.
Eso me hizo ser más consciente de lo que pasaba en mi interior.
En una ruptura se pasa mal, muy mal, pero se sale más fuerte y más sabio.
No mantener contacto ayuda muchísimo en la recuperación, pero es cierto que a veces es inevitable indagar en la vida de tu ex (más ahora con las redes sociales) o intentar encuentros casuales.
Es importante en el proceso de duelo que no haya contacto o conservemos cosas que nos recuerden a nuestras ex parejas.
Esto no tiene por qué ser definitivo, pero es necesario al principio para superar una ruptura. Intenta mantenerte lo más alejado posible de posibles tentaciones y recuerdos.
Más adelante, cuando estés mejor, puedes volver a sacar las cosas que te recuerdan tu pasada relación. Siempre serán parte de ti y de tu experiencia de vida.
Cuando nos hacemos responsables de nosotros mismos y de nuestras vidas la magia ocurre y encontramos lo que de verdad necesitamos. No podemos responsabilizar a nadie de nuestra felicidad.
Una frase muy típica que se suele decir es “Un clavo saca otro clavo”. Podemos estar tentados a probar con alguien nuevo y sacarnos a nuestras ex parejas de la cabeza. Esto puede dar la ilusión de felicidad momentánea, pero acaba siendo contraproducente y dificultando más el proceso.
No debemos intentar enterrar nuestros sentimientos cubriéndolos con una ilusión. Si no tomamos tiempo para superar nuestra ruptura y sanar, la misma situación se repetirá con las nuevas parejas. Hay que buscar en nuestro interior.
¿Qué busco en mi interior?
Busca quién eres, que te gusta, que esperas de una relación.
Aprende que la soledad en este momento es necesaria para coger fuerzas y establecer nuevas bases en tu persona.
No te conformes con algo que no te llena, pero asume que nadie tiene que llenar tu ideal.
Las personas somos todas diferentes, pero algunas más afines a otras definitivamente 🙂 Cuando menos lo esperes conocerás a alguien que te llena sin la necesidad de buscar un parche emocional.
Aprovecha este momento de introspección para conocerte y ver que la vida es mucho más. Haz una lista con las cosas que quieres hacer y llénate de ti mismo. No hay nada más atractivo que alguien que sabe lo que quiere y que tiene un propósito, enamórate de ti y vive tu vida.
Vive, ama y aprende.
Cuando el tiempo pase y veas todo con más objetividad te darás cuenta de por qué la relación no funcionó. En la vida siempre estamos creciendo y evolucionando, todas nuestras relaciones nos enseñan algo muy valioso.
Debemos agarrar esas enseñanzas y crecer para vivir, amar y aprender a querer mejor. Es un trago amargo, pero se sale, disfruta de ti mismo o misma ahora.
Haz cosas que siempre has querido hacer, piensa en lo que realmente necesitas. Tienes una nueva oportunidad ahora mismo para ser mucho más feliz, con o sin pareja.
En mi caso el amor me produjo una gran herida que hizo que intentara camuflar mi dolor volcando mi energía en cosas que no me dejaran tiempo para pensar. Eso postergó mi recuperación, pero en esos momentos fue mi escape.
Con el tiempo asumí la realidad, evolucione y tomé consciencia de que me correspondía a mí el sacarme de esa situación.
Aprendí a estar conmigo misma sin anhelar una pareja. Entendí que la dependencia emocional es perjudicial en cualquier relación si se presenta de forma muy acusada.
Más tarde conocí a una persona especial cuando no estaba buscando el amor y soy mucho más feliz ahora. Me siento entendida y apoyada, sigo evolucionando y aprendiendo lo más que puedo. No solo para conservar mi relación, sino para seguir mejorando la relación conmigo misma.
Si amas a un pájaro déjalo volar, si vuelve será siempre tuyo. Si no vuelve, es que nunca lo fue. ~Cupidoh.
¡Ánimo!
Os dejo con un libro:
El libro es bastante popular en Amazon y tiene muy buena crítica. Según he leído realmente ayuda a ver las cosas desde otro punto de vista.
«Aunque ahora lo veas todo negro, si haces las cosas bien, si pasas página con elegancia, descubrirás que un nuevo tú, mejor, más fuerte y más sabio, emerge de las cenizas. Un día de estos, no muy lejano, comprobarás que el sol vuelve a brillar, y que brilla aún con más fuerza que antes. Y serás consciente de que tienes delante de ti un futuro mejor del que jamás te hubieses atrevido a soñar.»
Espero que este post ayude a alguien que esté pasando por el mal trago de superar una ruptura. Si conoces a alguien que esté pasando por esto y crees que este texto puede ayudarle no dudes en compartir. ¡Gracias por leer!
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